Escúcheme Melitón,
hoy ando muy preocupau.
Ande se han metido tuitos?
me han dejau abandonau,
el vasco hizo una amagada
pero al fogón no ha yegau.
¿Será que juimos muy brutos
y el vasco se arrepintió?
Encima, quedamos pocos…
¡la pucha… que lo tiró!
Tengo chismes en el buche
y Apretau que no me ayuda,
encima yo ando de a pié
y encerrau por esta yuvia.
Me mojé las apargatas
al cruzar por una esquina
y encima no tengo a naides
en este rancho sin china.
Ansina que como pude
me amasé unas tortas fritas,
como había harina común
me salieron refinitas,
duras, sin sal y redondas,
lo mesmo que unas rueditas.
casi parecïan de goma,
y al pasar por el garguero,
me atoré con un cachito
y casi me caigo al suelo.
Ahí justo, yegó Apretau,
y como no tiene calma,
me salvó de morir ahugau,
porque me pegó ahí nomás
un talerazo en la espalda.
Y me dijo sentencioso:
-Hilacha, téngalo en cuenta,
puede costarle la vida,
lo que le voy a decir-
Esperé varios minutos,
pero nada me decía,
mientras se tomaba el mate
y las tortas se comía.
Cuando ya estaba por dirse
montado en su fiel Poroto,
le pregunté con sigilo
qué cosas podían costarme
la vida ansí redepente.
Y me respondió:-no ej cuento,
las cosas que via decir,
se las tengo que escrebir
pa que usté las mande al bloj,
aura no! en otro momento!
Aura estoy desorientau,
Melitón ,usté no me habla,
el vasco, que no aparece,
Apretau parece Borges
con sus palabras estrañas,
toy más pobre que una araña,
cobré mi jubilación,
ya me duele el corazón
tengo reuma en un tobillo,
me he quedau sin calzonciyos,
las alpargatas mojadas
y este viejo malandrín
se comió todas las tortas
y a mi no me dejó nada.
EL GAUCHO HILACHA
(En crisis y en soledad)
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