No es un secreto nuestra admiración por Rafael Darío Capdevila por su capacidad intelectual, su trabajo histórico-literario, su hombría de bien y su don de gente. En múltiples ediciones de La Palabra (ayer) se destacó su obra que había conquistado el respeto y reconocimiento de sus conciudadanos y su proyección fuera de los límites de Tapalqué. Uno de sus libros, publicado en 1973, lleva el título "Pedro Rosas y Belgrano, el hijo del General"., donde se revela la existencia de un hijo del General Manuel Belgrano, hijo adoptivo de Juan Manuel de Rosas.
Hoy en el diario La Nación aparece un artículo de Rolando Hanglin, titulado: "Un príncipe argentino", donde se lee el siguiente párrafo: "Un cuidadoso estudio sobre su vida fue publicado en Tapalqué (Ediciones
Patria, 1973) con el título "Pedro Rosas y Belgrano, el hijo del
General", firmado por Rafael Darío Capdevila. Este autor recibió
informes del coronel Rodolfo Rosas y Belgrano, bisnieto de Pedro Pablo.
Sí, como se enuncia en el título, el tiempo es el encargado, a veces lentamente, de reconocer la obra y hacer justicia con aquellas personas que, como Capdevila, dedicaron sus vidas a enriquecer el patrimonio cultural de sus pueblos.
¡Gracias Capdevila por el protagonismo, que le diste a Tapalqué, en el ámbito cultural!
GSF
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