El miércoles, paro nacional

El miércoles se ha convocado a un paro nacional con marcha a Plaza de Mayo, en reclamo de la suba del mínimo no imponible del impuesto a las Ganancias y la eliminación de los topes en las asignaciones familiares. En este clima de confrontación en el que se vive, casi en forma permanente en la Argentina, se acusa a los que adhieren al paro de destituyentes y otros términos descalificantes.

Con estas expresiones grandilocuentes ¿se estará buscando que los ciudadanos no piensen que quién le dio el poder al dirigente sindical fue el actual gobierno?

 Quien escribe estas líneas no estuvo de acuerdo cuando, el mismo dirigente, llamaba a la rebelión fiscal, en Plaza de Mayo . Muchos de los que ahora lo descalifican, lo aplaudían. También existía preocupación cuando, amparado por el gobierno, el lider camionero se permitía robarle los afiliados a otros sindicatos o impedía la salida de los talleres de los medios de prensa o introducía los camiones en las rutas para hacer fracasar los reclamos del campo. entre otras medidas autoritarias. Y están las fotos en las que muchos de los que ahora lo denigran, aparecen con gorritos camioneros

Y ahora como la relación se ha roto ¿todos tienen que dar la misma  voltereta?.

Siempre se ha tratado, en estos comentarios, de alentar el debate de ideas, no de personas. Coherente con ese pensamiento se invita a analizar la situación sin tener en cuenta los nombres de los que la protagonizan:

*¿Está bien que se elimine en forma total o se suba el mínimo no imponible del impuesto a las ganancias para asalariados?

*¿Es correcto que se elimine el tope en las Asignaciones familiares?

*¿Es ético apoyar el reclamo convocado por un dirigente sindical que hasta ayer ignoraba esos mismos reclamos?

*¿Es lícito que quienes gobiernan en un momento determinado, permitan evadir la ley a los  amigos y los desacrediten cuando la amistad se ha roto?.

Sin agotar la lista de preguntas, está claro que hasta el presente los proyectos presentados por la  oposición, referidos al tema, han sido ignorados por los legisladores oficialistas y por los que representan al sindicalismo amigo y es obvio también que el gobierno no cambiará de postura porque ha transcurrido demasiado tiempo desde que está en el poder y han ignorado todos los proyectos  para la modificación de este Impuesto que con la inflación se torna más gravoso. Y ahora se presenta la oportunidad de realizar un reclamo masivo, con todo el poder otorgado por el mismo oficialismo.

 Cada uno buscará y encontrará sus propias respuestas sin olvidar, que no es momento de fanatismos ni ideas corporativas sino de racionalidad  porque están en juego principios de libertad, democracia, república, igualdad ante la ley, justicia, equidad, por citar solo algunos.

Un país no progresa si cada uno se abroquela en sus construcciones mentales y se niega al diálogo. Progresa cuando los que están en el gobierno junto a la ciudadanía, construyen un país mejor para todos.

GSF

**En lo personal ya tomé mi propia decisión.  Iniciaré un paro, en mi propio domicilio, para que en el reclamo se contemple la situación de los jubilados, cuya asignación no es ganancia sino lo que le corresponde por aportar durante años, acorde a las leyes vigentes.