ARNALDO ANDRÉ Y MARTA GONZALEZ
 Una
                                                          Comedia
                                                          delicada e
                                                          inteligente
                                                          que transita
                                                          los últimos 40
                                                          años de una
                                                          pareja.
                                                          Terceros en
                                                          discordia,
                                                          reproches,
                                                          familia, y el
                                                          paso del
                                                          tiempo son los
                                                          tópicos que
                                                          desarrollan
                                                          Mariano y
                                                          Roberta a
                                                          través de
                                                          profundas
                                                          charlas y
                                                          reflexiones
                                                          exquisitas.
                                                          
Arnaldo
                                                          André y Marta
                                                          González 
                                                          en “Intimidad
                                                          indecente”.El
                                                          tiempo, la
                                                          soledad y el
                                                          amor con
                                                          humor. La
                                                          pieza teatral
                                                          tiene una
                                                          trama
                                                          maravillosa y
                                                          un guión que
                                                          se deja
                                                          llevar. Sin
                                                          dudas, el
                                                          mismísimo
                                                          André como
                                                          director, ha
                                                          logrado
                                                          hacernos pasar
                                                          por una
                                                          catarata de
                                                          sentimientos:
                                                          la tristeza,
                                                          la angustia,
                                                          la alegría, la
                                                          mentira y el
                                                          humor. La
                                                          ambientación
                                                          es sencilla
                                                          pero eficaz,
                                                          transcurre en
                                                          el living y el
                                                          comedor de la
                                                          casa, y es
                                                          allí  donde
                                                          los actores
                                                          encarnan con
                                                          gran nivel un
                                                          conflicto de
                                                          alta
                                                          intensidad.
El
                                                          amor que ha
                                                          unido a esta
                                                          pareja se ve
                                                          deteriorado
                                                          por la rutina.
                                                          Mariano
                                                          confiesa su
                                                          affaire con
                                                          una amiga de
                                                          su hija, 30
                                                          años menor. Lo
                                                          que lleva a
                                                          Roberta a
                                                          echarlo de su
                                                          casa. Dejan de
                                                          convivir, pero
                                                          no de amarse.
                                                          El sigue
                                                          frecuentando
                                                          la casa de
                                                          ella y así van
                                                          poniéndose “al
                                                          día” de lo que
                                                          cada uno hace
                                                          con su vida.
                                                          Así,
                                                          transcurren
                                                          años, siempre
                                                          con el tono de
                                                          humor
                                                          presente.
El
                                                          paso del
                                                          tiempo merece
                                                          destacarse.
                                                          Las
                                                          actuaciones
                                                          son soberbias
                                                          desde el
                                                          inicio. Pero
                                                          los cambios de
                                                          edad
                                                          compuestos por Marta
                                                          González y Arnaldo
                                                          André son magníficos. Ella logra ser una
                                                          abuelita
                                                          dulce, donde
                                                          su boca, el
                                                          temblequeo de
                                                          la pierna, los
                                                          movimientos de
                                                          sus manos, sus
                                                          olvidos, hacen
                                                          que ese rol
                                                          salga a la
                                                          perfección.
                                                          El, por su
                                                          parte, también
                                                          logra un
                                                          “viejito” que
                                                          camina lento,
                                                          arrastra sus
                                                          pies y
                                                          posiciona la
                                                          boca como tal.
Es
                                                          un inteligente
                                                          recurso que
                                                          haya momentos
                                                          de confesión
                                                          hacia el
                                                          público,
                                                          convertidos en
                                                          graciosos
                                                          monólogos. El
                                                          final es
                                                          poesía pura.
                                                          Visualmente
                                                          emocionante y
                                                          fuerte al
                                                          mismo tiempo.
                                                          Podría decirse
                                                          que es el
                                                          remate
                                                          perfecto para
                                                          cerrar esta
                                                          historia.
“Intimidad
                                                          indecente”brinda
al
                                                          espectador una
                                                          experiencia
                                                          adulta y
                                                          realista. Es
                                                          una obra
                                                          magnífica en
                                                          su honestidad
                                                          acerca de la
                                                          vejez que, sin
                                                          dudas, toca de
                                                          cerca al
                                                          espectador y
                                                          lo hace
                                                          reflexionar
                                                          sobre el amor
                                                          y la
                                                          existencia
                                                          humana. Una
                                                          obra para
                                                          reír,
                                                          emocionarse y
                                                          disfrutar.
Libro:
                                                          Leilah
                                                          Assumpcao.
Traducción
                                                          y Adaptación:
                                                          Maria
                                                          Antonieta
                                                          Eyras
Dirección:
                                                          Arnaldo André
Producción
                                                          General: Los
                                                          cinco Pasos
                                                          s.r.l
Arnaldo
                                                          André y Marta
                                                          González 
                                                          en “Intimidad
                                                          indecente” se
                                                          presentarán el Viernes
                                                          15 de Agosto a
                                                          las 21:30 hs. en
                                                          el Teatro
                                                          Español de
                                                          Azul con entradas numeradas de
                                                          distintos
                                                          valores de
                                                          acuerdo a la
                                                          ubicación.

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