jueves, 21 de noviembre de 2013

Sarmiento y los gorriones

Admiro a Sarmiento. Sí, a pesar de todos los errores que cometiera y de las exageraciones que el mismo escribiera desaprensivamente, para que quedaran grabadas para siempre y la posteridad se las recriminara. Pero su genio incomparable, seguramente sin utilizar ni un solo ladrillo, le permitió levantar una monumental estructura que contribuyó a forjar el perfil de los argentinos, mientras se mantuvieron en vigencia sus ideas sobre la educación popular. 
Para entender lo que hizo Sarmiento, imaginemos lo que era el país cuando él inicia su presidencia (1868-1874). Hacía solo cinco años que se había fundado Tapalqué. Seguramente en este sesquicentenario, en algún acto cultural, habrán podido recrear como era la situación socio-cultural del país en ese momento. Si así no ha sido, hay un relato histórico de Rafael Darío Capdevila, en su libro "El habla paisana" titulado "Un tal cacique Varela" (pág.510), que permite formarse una idea sobre la vida cotidiana en aquellos tiempos.
Al llegar a la presidencia, Sarmiento impulsa la educación y la cultura. Encuentra una frase que aún resuena en nuestros días: "Educar al Soberano". Consideraba que  el Soberano era el pueblo, porque es él quien elige a las autoridades para que manejen los asuntos sociales, económicos y políticos de la Nación. Había que educarlo para que supiera elegir, para que el país marchara por la senda del progreso y tuviera un mejor futuro  

 “Lo que necesitamos primero —dijo— es civilizarnos, no unos doscientos individuos que cursan las aulas, sino unos doscientos mil que no cursan en las escuelas”.  
. Esa obsesion por alfabetizar las clases populares lo llevó a fundar muchas escuelas cuando fue Presidente. Acá hay que aclarar un concepto: En la actualidad se cita como un logro en educación, los edificios que se han construido, pero Sarmiento fundaba escuelas, es otra cosa. Su preocupación estaba puesta en que más cantidad de personas ingresaran al sistema escolar, pero no para contenerlos sino para educarlos. Por otra parte, ahora la preocupación está puesta en regalar computadoras. Está bien, pero hoy muchos niños escriben rudimentariamente y no entienden lo que leen. ¿Podrán ingresar, participar y disfrutar mínimamente del mundo cibernético, como la gente que concurrió a las escuelas de Sarmiento, disfrutaba de los libros?

Sarmiento decía: "Los pueblos se encaminan a la igualdad y al nivelamiento posible en la distribución de los goces que la sociedad debe asegurar a cada uno de sus miembros, para que la asociación no sea en ventaja exclusiva de algunos cuantos, nacidos para la riqueza, los honores, la ilustración y las ventajas de la vida civilizada, en detrimento del mayor número, condenado a permanecer siempre en la miseria, el embrutecimiento y el vicio."

Imaginemos al país con un gran número de personas que no logran insertarse en el tejido social de la Nación. Sarmiento, no solo organizó un sistema educativo para que se integraran sino que convenció al país que en la educación y la cultura, estaba el futuro
 Imaginemos, por un momento, la admiración que causaría hoy, si surgiera un hombre que ideara un sistema educativo que permitiera absorber a toda la marginalidad del país y convenciera a la población que a través de la educación se puede terminar con la inseguridad, con los traficantes, la delincuencia y las muertes... Por empezar muchos no le creerían, preferirían el gatillo fácil. ¡Error y horror al mismo tiempo! A Sarmiento no sólo le creyeron cuando  explicaba su proyecto sino que lo llevó  la práctica con éxito.
 Por supuesto que hay que situar a Sarmiento en su contexto histórico -fue un producto de su época- con los errores de apreciación y concepto, propios en un hombre autodidacta, formado en una época donde las ideas y creencias del mundo eran distintas y en muchos casos opuestas a las de ahora. Sarmiento no fue un santo, ¡fue un genio!
  Como todo genio tuvo detractores y admiradores Entre los primeros hay quienes le atribuyen, socarronamente, que fue quien trajo los gorriones a la Argentina. Hoy encontré un artículo titulado "Cuando Mao intentó exterminar a los gorriones". Al leer el artículo, una sonrisa iluminó mi cara.
GSF

*Les transcribo el enlace para que los que los interesados puedan leerlo. Es muy interesante:
Enlace: 
http://blogs.lainformacion.com/strambotic/2009/12/07/cuando-mao-intento-exterminar-a-los-gorriones/

No hay comentarios: