
¡Feliz Año 2011 para todos!
No es habitual en mí opinar sobre deportes y menos aún, sobre el fútbol. Sin embargo, ante todo lo ocurrido en mi querido Tapalqué, he decidido no permanecer indiferente. Mucha pena he sentido cuando supe que la violencia, una vez más, había ganado todo; logrando que los comentarios, en vez de ser deportivos, fueran policiales…
Entonces recordé que yo tengo sangre de mis antepasados en los dos clubes que ayer disputaban un campeonato. En mi hogar me enseñaron a amar el esfuerzo y la pasión que se ponía para consolidar un objetivo. Así, mi bisabuelo Nicolás Dáttoli, estuvo en la comisión fundadora del Club Sarmiento, sólo porque los colores de su bandera son los mismos que aquellos, celeste y blanco que lo recibieron y cobijaron cuando desde muy pequeño, llegó de Italia y se quedó para formar su familia. Y, por otro lado, Salvador Milione, tío-abuelo, que también integró la fundación del Club Atlético; movilizado por sus colores compartidos con Boca Juniors, aquel equipo de sus amores. Nunca pude elegir: quizá eso no está bien, pero si hay algo que aprendí de ellos, es que el fútbol es un deporte, que los equipos juegan campeonatos, que los partidos se ganan o se pierden, que la pasión no es lo mismo que el fanatismo porque aquella permite el respeto y en cambio, el fanatismo enceguece y quien lo vivencia, se vuelve intolerante; aprendí que se puede alentar a un equipo sin necesidad de incluir la “anatomía de la madre o de la hermana” en ningún cántico, que para festejar no es obligación destrozar nada, ni golpear a nadie…En fin, pareciera que lo único que prevaleció en este vergonzoso espectáculo fue la expresión máxima de las frustraciones sociales, muy presentes en este país, y aunque yo no conozco los reglamentos deportivos, me atrevo a decir, que hoy quedaron muy lejos los sueños de mis antepasados; ya que ellos volvían del campo de juego y compartían la mesa porque la familia siempre estaba primero…
Lamento estos hechos y espero que quienes los protagonizaron o permitieron que ocurrieran, se arrepientan y piensen que hubiese sido venturoso comentar un campeonato de fútbol, sólo eso, nada más…
DELIA GUZMÁN
Cuando llega el verano y tu calle se cubre de flores que asoman desde los jardines, creo verte venir, con tu chaqueta verde, tus zapatillas cómodas, el bolso sobre el hombro y tu hermosa pero triste sonrisa.
María helado, María caramelos, María quiero, dame, alcanzame…
María que nunca aprendiste a decir no.
Ahora que las distancias entre tu espacio y el mío nos acercan, vuelven hacia mí los días de nuestra juventud, nuestras confidencias y aquellas charlas mano a mano en las que nos contamos todo.
Pero nos faltó tiempo a las dos, ese que hubiéramos precisado para disfrutar, para alivianar el peso de nuestras cruces, y vos y yo seguimos por líneas paralelas, entregando nuestro tiempo a los demás, olvidándonos de vivir.
Algunas de mis amigas dicen que soy fuerte, eso yo no lo sé.
A veces pienso que Dios me tiene lástima y me deja para que haga reír a los demás, para que escriba, para que hable, como en estos momentos.
Faltan pocas horas para que el año se termine.
Debe ser por eso que te recuerdo tanto.
Atadas al yugo de nuestros mutuos trabajos, esperábamos el anochecer para cruzar algunas palabras, antes de regresar a casa.
Diciembre tenía para las dos ver desfilar caravanas de personas comprando, reclamando, exigiendo, y a veces sufriendo porque las monedas no alcanzaban…
Los domingos María! qué delicioso aroma venía desde la cocina de tu mamma, cuando aún la tenías, porque ahí sí, entablábamos nuestras charlas y yo te hacía reír ¡y qué linda era tu risa!
Quiero contare algo, no sé cuándo, pero un día voy a llegar a la tierra de los abuelos y te voy a buscar en los rostros de las mujeres gringas y te voy a encontrar, te lo prometo. Te lo prometo amiga…
BEBA LAPASTA
(Recordando a María Símula)
Como en las grandes ciudades, Tapalqué no es ajeno a los contratiempos ocasionados por la falta de billetes en los cajeros automáticos.
Desde horas tempranas, algunos vecinos hacen cola para poder acceder a percibir lo que por derecho les corresponde.
No entendemos el significado de este problema, justo cuando debiéramos recibir lo nuestro y marchar tranquilos a cumplir con todos los trámites.
Pero no, sumado a los intensos calores de los últimos días, si esperás cobrar en el cajero, te aparece la leyenda que entre otras cosas dice que por el momento no hay dinero.
Algunos se enojan y se van, otros se las bancan, bromean para distenderse, y preguntan a los empleados qué sucede.
La respuesta es :-¿Cómo que no hay dinero? ¿Está segura?-
Y no, no hay, seremos viejos pero no somos opas, pasamos la tarjeta dos , tres, cuatro veces…y el dinero no sale, ¡no señor! no sale porque tampoco está dentro del banco.
La segunda respuesta es:-Esperen 40 minutos, están cargando el cajero-
Pero no es al cajero, es a nosotros a quienes están cargando.
Luego de esperar por más de tres horas, llegó el transporte de caudales y ahí, luego de otra espera (suponemos que sería para descargar los billetes, contarlos, olerlos, acariciarlos, palmearles la espalda o qué se yo, algunos pudimos cobrar ya cerca del mediodía).
Ignoro qué pasará después.
Nuestros empleados bancarios de Tapalqué, no tienen la culpa.
Nos responden con palabras emanadas de la superioridad.
Cuando se nos atrase el pago de los servicios públicos por falta de dinero, nos van a perdonar la demora?
Y como yo tengo alma de niño ensayo esta canción:
¡Aserrín aserrán, los billetes dónde están?
Nadie tiene una respuesta válida.
(No le echen las culpas al Gran Bonete, éste personaje, cansado de ser acusado por quienes no se hacen cargo de nada, pidió asilo en otro país).
BEBA LAPASTA
MURGA DEL JUSTO A. PRETADO
Al marchar no queremos dar consejos
porque los dejamos a los viejos,
sólo decir que la murga canta siempre
porque es el pueblo que la siente.
Hay que cantar y hay que contar
por lo que está pasando
y el día que no suenen las guitarras
y ningún instrumento esté sonando
quedará nuestra voz enmudecida,
rumbo a la madrugada, caminando.
Dicen que la murga es libertad,
dicen que la murga es esperanza,
dicen que la murga dice todo,
sólo hay que disponerse y escuchar.
dicen que la murga es bombo y redoblante,
la murga es viento sur de voces
que te dicen:¡Adelante!
Un verso simple y claro
que queda entre la gente
es mucho más que un cantar.
Cantemos, cantemos
que hay mucho que contar.
Todo está empezando nada va a terminar.
Un hotel que es puro cuento
un museo que murió,
y una entrada al pueblo
que en la nada quedó.
¿Y la guita dónde está?
si el gobierno la mandó.
Ya toca el tambor, ya toca el bongó,
quejarse pa qué?
En un pueblo llamado Tapalqué
Todo es propaganda
y proselitismo, todos son iguales
y siempre los mismos!
Año nuevo viene y el año viejo se va
van a hacer mucho barullo
otra vez hay que votar!
De todo lo prometido
nada, nada se ha cumplido…
Cantando de barrio en barrio
razón de nuestra existencia
es la verdadera forma de lograr
la permanencia..
Por eso en la despedida
queremos hacer presente
que la murga no se va
porque es parte de la gente.
Que no cantemos que no, que no cantemos que no,
muy bajo y desafinado.
Cantemos como se debe
murga de Justo A. Pretado.
(Cosquiyáu por loj alborotos pre-electorales, haciendo uso e’ plena libertá condicionada.)
No tiene su origen en una aparición o un hecho milagroso, sino que nació para cristalizar el amor que los argentinos sienten por esta bebida que permite compartir charlas y buenos momentos.
Con este gesto de tomar el mate, se expresa el símbolo de familia-amistad-unidad-encuentro-compartir-lo mismo entre hermanos y amigos- un gesto muy lleno de contenido humano, cristiano y argentino.
La imagen de “Nuestra Señora Gaucha del Mate” a la que se hace referencia fue creada por la pintora María Inés Rosñiski y representa a la Virgen como una pequeña y joven campesina, con sus ropas típicas, trenzas en su pelo, sentada a la sombra de un árbol en medio de un campo abierto. Tiene un brasero a su lado y el mate entre las manos, ofreciéndolo.
El mensaje que se desprende de la imagen de la Virgen “tomando mate” de nuestra tierra es de unidad, es de familia, de fraternidad, de amistad, de encuentro…
Nuestra Señora Gaucha del Mate es hoy de plena actualidad y se hace portadora de ansias y deseos de solidaridad y paz que tenemos todos los hombres…
Aquí me pongo a cantar
mientras la pava rezonga,
esta argentina milonga,
sólo para acompañar
una mateada sin par,
porque hoy ceba la Señora,
milagrosa cebadora
que en cada mate que ofrece
con su mirada parece
más que Reina, servidora.
Fragmento de "Nuestra Señora Gaucha del Mate"
por el Padre Darío Rodríguez, misionero betharramita.
(texto completo en http://forosdelavirgen.org/506/nuestra-senora-gaucha-del-mate-argentina-7-de-enero/
LE ESCRIBO AMIGO MELITÓN
Pa contarle que…
Cansado yegué a mi rancho
acompañáu por los teros
que por culpa del calor
armaban mucho entrevero,
me refresqué la cabeza
me saqué las alpargatas
y las dejé un poco lejos
debido al olor a patas.
Sentáu bajo el sauce añoso
le escribo, amigo, aparcero,
pa decirle que hace tiempo
me siento como extranjero.
Dicen que la gente pobre
ha salido a reclamar
y nos muestran las noticias
que a uno ya lo hacen temblar.
Pero hay algo muy concreto
y lo tengo comprobado:
con ese tipo de pobres
no estoy identificado.
Mientras trabajo en mi chacra
y lo paso madrugando,
ellos a golpes y a palos
tuito van atropeyando,
y como no sé quienes son
porque andan encapuchados
y salen dende una esquina
se meten en tuitos lados,
se me hace que alguien de atrás
tiene todo calculado.
La imagen de mi país
me esta causando vergüenza,
parece un corso, una murga,
una cosa sin goyete,
hoy nos venden un proyeto
dispués lo bochan , es al cuete!
Buscar un poco de paz
hoy parece un desatino
No quiero ser extranjero,
yo quiero ser argentino,
quiero caminar tranquilo,
orguyoso e’ mi decencia
y que no venga un ladino
a partirnos la cabeza.
Es muy lindo hacer balances
con resultados genuinos,
pero no que los fabriquen
yevando agua a otro molino.
Y si ya lo estoy cansando
con mi verso y mi lamento,
piense que no soy yo solo
el que carga el sufrimiento.
Están los que nada dicen
y que siguen trabajando,
que no se tapan la cara
cuando los están matando,
Que quieren vivir tranquilos
yevar el pan a la mesa,
y pasar la navidá
sin tormentos ni tristezas.
Al fin y al cabo cuñáu
es poco lo que pedimos:
tan sólo un poco de paz
y seguir siendo argentinos.
EL GAUCHO HILACHA
( más triste que Jueves Santo).
La vocación, el profesionalismo y la creatividad son muy notables cuando van juntos y de la mano…
El viernes pasado, a una noche destemplada para esta época, la cubrió la calidez de un hermoso espectáculo que fue el cierre de las actividades del Taller de Teatro dirigido por la Profesora Agustina Fittipaldi con sus alumnos más pequeños; y entonces el mal tiempo tuvo que retirarse: “mutis por el foro”!!!
El ambiente había sido preparado cuidadosamente; la música, ideal para la ocasión: innovadora!
Cada escena presentada mostraba la calidad en la preparación de los pequeños actores y en cada uno de ellos, se expresaba la “mano-guía” de su profesora acompañando los primeros pasos sobre un escenario.
Algunos personajes parecía que se hubiesen escapado de algún libro de cuentos; pero no era necesario imaginarse nada: los pequeños artistas supieron darles vida y nos regalaron ternura, nostalgia, travesuras, fino humor, magia y música.
En más de una oportunidad, sus escenas fueron interrumpidas por los aplausos fervorosos del público.
Sinceramente maravilloso el espectáculo! Y dentro de este “disfrute” teatral, quiero destacar la sencillez y calidez humana de la Profesora Agustina, porque hoy que estamos sometidos ante tanto individualismo, esas dos virtudes son muy valiosas y conjugadas con su vocación y profesionalismo, son las únicas capaces de lograr algo importante como esta puesta en escena.
FELICITACIONES!! Y que ese duende escondido en su Arte siga inspirándola junto con sus alumnos.
Delia Guzmán.