Mi paseo por Salta
Un viaje con mucha ilusión, llegar a Salta fue emocionante. Nos alojamos en la parte colonial de la ciudad, una belleza. Al día siguiente, sábado, nos dirijimos a la Virgen del Cerro, un tramo en auto siempre subiendo. Cuando llegamos nos recibe un guía y nos indica donde dejar el coche. Cuando nos bajamos un gran mareo, nos apunamos.
Descansamos un rato hasta sentirnos bien y seguimos subiendo. A mitad de la caminata hay colaboradores que nos dan agua y nos hacen descansar y preguntan si nos sentimos bien. Seguimos y llegamos a la cima. Algo hermoso, centenares de personas, un silencio inexplicable solo murmullos.
Nos hacen buscar nuestros lugares que son asientos de piedra, uno al lado de otro y hay que esperar hasta las 14.00 horas que pasa la señora Maria Livia a hacer la imposición de manos. Nosotros llegamos a las 11.00 horas, así que tuvimos que esperar bastante. Por parlantes sus colaboradores rezan el rosario y un cura bendice los rosarios, música y meditación, gran paz.
Voy a contar mi experiencia personal, realmente dudaba de todo lo que se comentaba de la imposición de manos, es decir lo que la gente contaba que le pasaba, pero debo reconocer que es cierto. Es la fe en nuestra virgen que por medio de Maria Livia nos pasa su amor. Cuando posó su mano sobre mi hombro y la miré a los ojos sentí emoción, un gran mareo y lloré desconsoladamente por unos segun
dos, fue algo inolvidable.
Infinidad de rosarios colgados de los árboles, flores hermosas, orden por donde miráramos. No se puede comer ni tomar nada arriba, no es un picnic y lo mas importante que no se cobra nada, no se puede dejar dinero a nadie.
Nunca vi tanta gente en silencio, fue un día felíz.
Vi mucha gente que si se desmayaba, los colaboradores nos hacen poner en hilera y se van colocando detrás nuestro por si nos caemos, así van corriendosé atrás de cada uno, algunos caían como plumas y al rato volvían en sí, realmente ver para creer. En ese momento no se pueden sacar fotos, es algo sagrado. Espero haya sido interesante mi relato, con cariño, Grace.
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3 comentarios:
Hace tiempo que buscaba un relato de algún viajero que hubiese visitado a la Virgen del Cerro en Salta. Sin conocerte, viniste a cumplir mis expectativas. ¡Gracias Grace! Tus palabras nos permiten aproximarnos a ese mundo espiritual y mágico, cuyos influjos vitales, alguna vez hemos sentido, sin poderlo explicar.
Impactante la imagen del árbol lleno de rosarios que, al ampliar la foto, se ven con nitidez. Hace pocos días se realizó una peregrinación que convocó más de 40.000 personas; ésto me lo contó otra gran amiga que concurrió a la misma. ¡Gracias Grace por compartir tus emociones con los lectores del blog!Un beso, Norma.
Muchas gracias por los hermosos comentarios y por invitarme a participar del blog, les mando muchos cariños. Grace.
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