En el año 2004, el Instituto Cultural de la Provincia de Buenos Aires publicó una obra de cinco tomos, con el título "Literatura Popular Bonaerense". El director de la obra es Adolfo Colombres y el contenido se detalla a continuación:
Volumen I: "Literatura breve";
II: "Cuentos y Leyendas", "Literatura Testimonial" y "Literatura Mapuche";
III: "El Canto Payadoresco";
IV: "Cancionero Tradicional";
V: "Cancionero Autoral".
Volumen I: "Literatura breve";
II: "Cuentos y Leyendas", "Literatura Testimonial" y "Literatura Mapuche";
III: "El Canto Payadoresco";
IV: "Cancionero Tradicional";
V: "Cancionero Autoral".
Para ubicar al lector sobre la importancia de la obra, en la Introducción General, su director Adolfo Colombres, marca la importancia de la lengua como vehículo de la cultura "puesto que ella, por sí sola, fue capaz de permitir la transmisión de los relatos, costumbres y conocimientos durante siglos y aún milenios". Más adelante destaca que el proceso recopilador de los cancioneros tradicionaqles argentinos empieza en 1926 con el "Cancionero de Catamarca" de Juan Alfonso Carrizo: el de Salta en 1933, el de Jujuy en 1934, el de Tucumán en 1937, el cancionero Cuyano en 1938, el de Santiago del Estero en 1940, el de La Rioja en 1942 y el de Córdoba en 1947, el de Corrientes Corrientes en 1999 y el de Entre Ríos recopilados algunos por Carrizo y otros por Di Lullo, Juan Draghi Lucero, Guillermo Terrera, Rubén Pérez Bugallo y Olga Fernández de Latour de Botas.
La provincia de Buenos aires no tenía una recopilación de su cancionero popular. Si bien había obras parciales, alguno de cuyos autores se mencionan en la introducción, Colombres propone hacia el año 2000 el "Programa de Rescate de la Literatura Popular e Indígena de la Provincia de Buenos Aires" que reunió y clasificó más de ochocientos mil materiales. Concluye Colombres en su Introducción: " La finalidad de esta obra no es tanto llevar las mejores manifestaciones de la literatura popular bonaerense a los sectores ilustrados - aunque estimamos que cumplirá dignamente este propósito que no se desdeña en modo alguno- sino retroalimentar y valorizar los declinantes circuitos de la oralidad, así como entrar en el sistema educativo formal , para asegurar el futuro a estas corrientes narrativas y poéticas que, además de esa belleza que imprime la pátina del tiempo, nos trasmiten una añeja sabiduría , tan necesaria para impedir que nos borren la identidad en una época que se ha dejado seducir por el vacío.
Tapalqué, en alguna medida está relacionado con esta obra. El tomo IV: "Cancionero Tradicional " fue recopilado por Rubén Pérez Bugallo. En el año 1988, un amigo del Semanario «La Palabra» investigador de música criolla tradicional bonaerense, que residía en la ciudad de Olavarría, anuncia la visita de Pérez Bugallo. Susy y Beba Lapasta y yo, Gladis Fittipaldi, lo acompañamos en aquel raid histórico en la búsqueda de Canciones Tradicionales. En el 4º tomo Pérez Bugallo agradece a las personas que le proporcionaron información y nombra a : Antonio Cucaresse, Cristóbal Deosgracia Capdevila, Guillermo Gándara, Omar Menvielle, todos de Tapalqué Periódicamente se irán publicando, en este blog, algunas de las recopilaciones de autores anónimos de esta obra que realizara el Instituto Cultural de la Pcia de Buenos Aires, para conocimiento de las nuevas generaciones y para los adultos que gustan de estos temas.
Y para que todo no quede en palabras, van algunas coplas de autor anónimo de la Colección de Jorge M. Furt
Nº 8
Cinco sentidos tenemos
a los cinco los precisamos,
y a los cinco los perdemos
cuando nos enamoramos.
La provincia de Buenos aires no tenía una recopilación de su cancionero popular. Si bien había obras parciales, alguno de cuyos autores se mencionan en la introducción, Colombres propone hacia el año 2000 el "Programa de Rescate de la Literatura Popular e Indígena de la Provincia de Buenos Aires" que reunió y clasificó más de ochocientos mil materiales. Concluye Colombres en su Introducción: " La finalidad de esta obra no es tanto llevar las mejores manifestaciones de la literatura popular bonaerense a los sectores ilustrados - aunque estimamos que cumplirá dignamente este propósito que no se desdeña en modo alguno- sino retroalimentar y valorizar los declinantes circuitos de la oralidad, así como entrar en el sistema educativo formal , para asegurar el futuro a estas corrientes narrativas y poéticas que, además de esa belleza que imprime la pátina del tiempo, nos trasmiten una añeja sabiduría , tan necesaria para impedir que nos borren la identidad en una época que se ha dejado seducir por el vacío.
Tapalqué, en alguna medida está relacionado con esta obra. El tomo IV: "Cancionero Tradicional " fue recopilado por Rubén Pérez Bugallo. En el año 1988, un amigo del Semanario «La Palabra» investigador de música criolla tradicional bonaerense, que residía en la ciudad de Olavarría, anuncia la visita de Pérez Bugallo. Susy y Beba Lapasta y yo, Gladis Fittipaldi, lo acompañamos en aquel raid histórico en la búsqueda de Canciones Tradicionales. En el 4º tomo Pérez Bugallo agradece a las personas que le proporcionaron información y nombra a : Antonio Cucaresse, Cristóbal Deosgracia Capdevila, Guillermo Gándara, Omar Menvielle, todos de Tapalqué Periódicamente se irán publicando, en este blog, algunas de las recopilaciones de autores anónimos de esta obra que realizara el Instituto Cultural de la Pcia de Buenos Aires, para conocimiento de las nuevas generaciones y para los adultos que gustan de estos temas.
Y para que todo no quede en palabras, van algunas coplas de autor anónimo de la Colección de Jorge M. Furt
Nº 8
Cinco sentidos tenemos
a los cinco los precisamos,
y a los cinco los perdemos
cuando nos enamoramos.
Nº 42:
Cuatro son las tres Marías,
cinco los cuatro elementos,
ocho las siete cabrillas,
once los diez mandamientos.
Nº 49
Las dichas del hombre duran
lo que las olas del mar,
la que nace, al punto muere,
olas vienen y olas van.
Nº 102
Yo nací como el hornero,
entre paredes de barro,
a la orilla de un estero
en un ranchito de palo.
Hoy en día se observa, en programas de un medio interesante como es la televisión, donde se ocupan en las banalidades de la gente mediática que no teme ponerse en ridículo, al exponer su intimidad. No se dan cuenta que son utilizados para hacer programas de bajo costo. Bien podrían aprender del uso del vocabulario, el respeto, la mesura y el recato del criollo, al referirse a las diversas contingencias de la vida.
Lamentablemente, en la Argentina, hace tiempo que se marcha tras el "Becerro de Oro" sin atender a las riquezas inagotables de su glorioso pasado.
G.S.F.
(continuará)
*La ilustración de tapa corresponde a Carlos A. Pellegrini, una acuarela de 1831.
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