Matrereando

CULPA’ EL MUNDIAL

Aparcero, me dio por soñar también,

y sin preguntar a quien

entiende de este deporte,

las patas como un resorte

se me querían escapar.

Ansí pude preparar

en un potrero cercano

dos arcos, que con mis manos

solo pude levantar.

Junté un montón de paisanos

y en antes de hacer el juego

les jui explicando certero

del juego, las picardías,

mientras que los dirigía

ante un triunfo asegurau

con Melitón y A. Pretau,

que los tenían en la mira.

El equipo opositor,

bien yamado, “Los ratones”,

tenían hechas mil reuniones

con vino, y grandes asados,

con los botines lustrados

y los hinchas: de amontones.

Como era de imaginar,

nuestro cuadro tan certero,

se llamaría “Los matreros”,

nombre que jue vitoriau.

En el pre calentamiento

mientras ellos se embuchaban

nuestras tripas nos sonaban

lo mesmo que vuvuzelas

los güesos cual castañuelas

de los bailes españoles,

como no teníamos botines

nos pusimos alpargatas

que con el olor a pata

nos daban más protecciones.

Jue en la tarde de un domingo,

la gente se había juntau,

Melitón se habia abrigau

como pa dirse pal polo,

A. Pretau, se quedó solo

hablando con sus ancestros

mientras yevaba anudada

en la panza su camisa

ande con tinta indeleble

le dibujó un 10 grandote

y nos dijo sentencioso:

acá no esisten las bromas:

soy 10, como Maradona

y naides va a discutir:

ejto es triunfar o morir,

y no importan las derrotas

porque truje una pelota

que hará goles para mi.

Jue entonces que Melitón

saliendo de abajo’ el poncho

dijo: un momento aparceros!

Respeten el reglamento,

no piensen por un momento

que haré cosas fraudulentas

que después quedan las mentas

y seremos basureados:

por no respetar, cuñado

debemos pagar las cuentas!

A.Pretáu no contestó

siguió su seño fruncido

a la espera del partido

en contra de “Los ratones”,

y sin pagar patacones

mucha gente había venido,

Del desarroyo’ el partido

diré sólo que ganamos.

Las estrategias que usamos

fueron: nuestro olor a pata,

cuando perdí una alpargata

al patear mal un penal

se la mandé a un concejal

justo en el medio e’ la geta,

lo dejé juera del juego,

tuve que patear de nuevo

y el primer gol anotar.

Más tarde jue Melitón

que viniendo como un cuete

pasó en medio e los ratones

lo mesmo que la luz mala

y el segundo gol de gala

anotó pa “Los matreros”

con un ataque certero

dende el medio de la cancha

mientras hacíamos pata ancha

porque íbamos 2 a 0.

El primer tiempo pasó,

nos juimos a descansar

sentaus tuitos en el suelo

sin tener sombra siquiera,

en tanto que “los ratones”

que venían bien pertrechaus,

bajo sombriyas sentaus

cada uno en su reposera.

No importa, dijo don Justo,

el hábito no hace al monje,

y aunque ellos se nos esponjen,

hasta áura, vamos ganando.

Sigan nomás descansando

y priéndanse a los amargos

que nos queda un tranco largo

pa coronarnos campeones.

Con unas tiras de tiento

me aseguré una alpargata,

me dolían tanto las patas,

les juro que no les miento,

era tal el sufrimiento, y debo serles sincero,

si no es porque soy matrero

tal vez alguno me entienda:

prefiero dejar los güesos

que abandonar la contienda.

Empezamos a jugar

pa definir el partido,

el adversario destruido

se encontraba mal parau

y jue un gol:-¡Gol de A Pretau!

con un tiro tan certero

que dejo KO al arquero

que debió ser reemplazau.

Pusimos en este encuentro

las máximas ilusiones,

vencimos a “Los ratones”

que se fueron de la cancha

sin querer intercambiar

nuestra única camiseta

mientras venía una avalancha

de gente pa saludarnos,

que a treinta metros estaban

saludando dende lejos,

no por precaución, canejo,

y lo digo con honor,

es que empezó a hacer calor…

(Saquen sus propias conclusiones)

EL GAUCHO HILACHA

(que se prendió al mundial, más vale tarde que nunca)