Matrereando

MIRE AMIGO MELITÓN

Cada vez más contrariau

escucho algunos consejos

que de arriba nos han dau.

acostumbrau a comer

muy poco y casi salteado,

es imposible que coma

lechones grandes y asados.

en antes decía el dotor,

no coma grasa cuñau,

y aura me dicen por radio

que yo estoy enquivocau.

Lo cierto es que yo no tengo

pretenciones de engordar,

y encima si como grasa

siguro, me via’ empachar.

Y lo que cobro es tan poco

cuando yego al mostrador,

si compro yerba, no hay vino;

vivir sin mate, es lo pior.

Pa poder comer fideos

con un poquito de queso

tenés que hacer un proyeto

y mandárselo al congreso.

Di ande viá comprar lechones!

acá están disparatiando!,

y encima, si como chancho,

mi cuerpo se irá alarmando.

No necesito recetas

para poder cocinar

¡quiero que bajen los precios

y nos dejen trabajar!

No quiero escuchar gansadas

que me suben la presión,

Si las dijera en mi radio,

me mandan al paredón.

No coman chancho, matreros

Y al comprar tengan cuidau,

porque seguro que adentro

hay micrófonos guardaus!

Bien la recuerdo a mi mama

cuando en alguna porfía,

parada en la puerta ‘ el rancho

sentenciosa me avisaba:

“Cuando la limosna es grande,

hasta el santo desconfía”.

¡Piedra libre!¡pido gancho!

¡desconfíen de estos chanchos!

EL GAUCHO HILACHA