miércoles, 20 de enero de 2010

Chistecitos humildes



Un señor, preocupado por su peso, fue a ver al médico.
-¿Cuánto es lo menos que ha pesado? -le preguntó éste.
- Tres kilos, 350 gramos.
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Un buen día, el director de un manicomio se dirige hacia la habitación donde se encuentran los locos y les dice: A ver, ustedes tres fuera!
Les voy a hacer una pregunta, si la adivinan los dejaré salir a la calle.
Le dice al primero: -¿6 x 6?. 1.000 -le contesta. El director se queda perplejo y sin decirle nada, se dirige hacia el segundo y le dice: -¿6 x 6? Primavera -le contesta.
El director ya pensando que no tienen remedio, se dirige hacia el tercero y le dice: -¿6 x 6? 36 -le contesta.
El director con cara de asombro y sorprendido, se dirige hacia el último loco y le dice: -Muy bien, pero ¿cómo lo has adivinado? El tercer loco todo entusiasmado le dice:
¡Pues porque he dividido 1.000 x primavera!
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Un chico de un pueblo pequeño fue con la escuela de visita a la ciudad. Lo que más le llamó la atención fue el estudio de un escultor, donde vio al artista dando forma a un inmenso bloque de piedra con un cincel y un martillo.
Al año siguiente volvió al mismo estudio en otra excursión del colegio y preguntó qué había salido de aquella piedra enorme. Se llevó una sorpresa cuando el escultor le mostró una estatua de Jesucristo.
- ¿Y cómo supo que estaba allí dentro? -preguntó incrédulo.
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Llega un tipo con un ataque de nervios a ver al psiquiatra y le dice: Doctor, llevo tres semanas soñando que mi suegra viene a comerme cabalgando sobre un cocodrilo.
¿Sí? ¿Está seguro?
¡¡¡Sí doctor!!! Esos ojos amarillos, esa piel escamosa, esos dientes afilados.
¡Hombre, qué terrible!
Un momento doctor, que ahora le describo el cocodrilo!
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En un cine en el que se iba a presentar un estreno, se formó desde temprano una larga cola. Entonces, una viejecita se acercó a la ventanilla y la multitud empezó a gritar:
-¡A la cola! ¡A la cola!
La anciana se detuvo un momento y la multitud calló, pero al volver a avanzar, la gente empezó a gritar a coro:
-¡No se cuele! ¡A la cola!
Y así sucedió muchas veces hasta que la viejecita, enojada, se alejó refunfuñando:
- ¡A ver ahora quién les vende las entradas!


Preguntita fácil
¿Por qué las burbujas de champaña suben en filas desde el fondo de la copa?
Hasta pronto. M.M.

7 comentarios:

Graciela dijo...

Muy buenos los chistecitos, pero lo de las burbujas todavía no lo se, voy a seguir pensando, hasta pronto.

BEBA dijo...

Yo pienso que después de la segunda o tercer copa, pueden ir en fila y hasta cantar el Himno Nacional.

M. M. dijo...

Holita (hola humilde), recién hoy 25 volví de Bahía y veo que no he tenido respuestas lógicas a mi pregunta. Claro, hace mucho calor... No dan ganas de pensar... Trato, en lo posible, que mis preguntas sirvan para "aprender". Son como pequeñas lecciones de cultura general. No cuesta nada ir a internet y hacer la pregunta correcta. A mí me encanta tener algo nuevo que aprender todos los días. Próximamente, la respuesta.

Graciela dijo...

Recién tengo internet y teléfono porque se había cortado, así que pensando sobre las burbujas supongo que puede ser que suben en fila para que al llegar a la superficie suelte todo su aroma el champagne o tal vez por el cristal de las copas, todo es suposición, bueno hasta pronto M.M.

M. M. dijo...

Tibio, tibio... ma chèrie Grace.
Me inclinaría por la segunda posibilidad. Una vuelta más de tuerca y... voilà.!!
(parezco Monsieur Hércules Poirot, otro gran personaje de Ágatha Christie). Es simple deducción... Las burbujas no suben a la superficie de cualquier manera, es por un motivo especial que lo hacen en fila... Au revoir, M.M.

Graciela dijo...

No se como llamarte si don Hércules o doña Marppless, puede ser porque por dentro las copas no son tan perfectas como por fuera, es decir el cristal no está tan liso, adios don o doña, jajaja...........

M. M. dijo...

Una copa de champaña contiene hasta 5 millones de burbujas de bióxido de carbono. Cuando se vierte champaña en una copa, incontables bolsas de aire diminutas quedan atrapadas en los rasguños y otras imperfecciones del cristal. Estas bolsas atraen el bióxido de carbono disuelto en el líquido y forman burbujas, las cuales ascienden en columnas porque emergen de los mismos sitios
"El libro gordo te enseña; el libro gordo entretiene y yo te digo contento: hasta la clase que viene". Crecí con Petete y el Topo
Gigio; no se puede negar!!! Muy bien, Grace. Au revoir. Miss Marple.