Constelaciones: Cruz del Sur y Centauro

En una interesante conversación que mantuve con Aníbal Aguirre y Quina Mora cuando estaba en La Palabra salió el tema de la Cruz del Sur. Allí aprendí que las estrellas Alfa y Beta del Centauro permitían distinguir la Cruz del Sur de otras formaciones similares que había en el firmamento. Han pasado los años y la inquietud despertada en aquella conversación siempre me ha llevado a investigar sobre las constelaciones.
Cuando buscaba estrellas para ilustrar la poesía de Cortazar, encontré esta explicación que me recordó aquella charla. Transcribo un fragmento para despertar nuevas inquietudes, al mismo tiempo que se la dedico a Quina y Aníbal con el cariño de siempre.

¿Qué son las constelaciones? Son figuras que las personas han formado en la imaginación, agrupando ciertas estrellas que se ven en una región del cielo. Las estrellas de una constelación no son agrupaciones reales de estrellas, no están unidas por ninguna fuerza (como la gravitacional por ejemplo) ya que unas pueden estar inmensamente más lejos que otras, lo que pasa es que las vemos “unidas” por efecto de la perspectiva, si nosotros pudiéramos viajar a otro lugar de la galaxia, las constelaciones que conocemos, durante el viaje se irían deformando hasta que llegaría un punto en el que el cielo sería irreconocible.

Los astrónomos han designado a las estrellas de las constelaciones con letras del alfabeto griego, comenzando con la letra Alfa que por lo general corresponde a la más brillante. Así, Alfa del Centauro, es la estrella más brillante de esta constelación, Beta del Centauro es la segunda en brillo, Delta, Gamma, etc.

La Cruz del Sur es tal vez la constelación más importante de nuestro cielo, porque sirve como referencia para la orientación desde nuestro hemisferio; el palo mayor siempre apunta hacia el sur. Si utilizamos al mismo como unidad de medida, veremos que cuatro veces y medio el tamaño del palo mayor, siguiendo la dirección a la que apunta, indican de manera aproximada el polo sur celeste (la proyección del polo sur en el cielo).

Para la cultura Inca, la Cruz del Sur era una representación de la Chacana (cruz cuadrada), y explica muchos elementos de la cosmovisión andina, por ejemplo: el palo mayor (vertical) representa el elemento masculino: la creación, el espíritu, la herencia; y el palo menor (horizontal) lo femenino: lo creado, la materia, la mama Pacha. Incluso se piensa que la fiesta de la Cruz (el 3 de mayo) es un ejemplo de la síntesis cultural entre la cultura andina y la occidental ya que, por un lado consiste en la celebración de la cruz cristiana y, por otro, el culto a la Chacana o Cruz del Sur.

Pero como las figuras de las constelaciones son fruto de la imaginación de las diferentes culturas, los Mapuches han imaginado que la Cruz del Sur es la huella del choike (avestruz); éste hermoso y mítico animal de las pampas patagónicas y del chaco, también puebla el cielo de los guaraníes, ellos lo llaman ñandú y tiene incluso su reserva de alimentos que es el saco de carbón al lado de la Cruz del Sur.

A la izquierda de la Cruz del Sur, se encuentran dos estrellas muy brillantes que la apuntan, de hecho, algunas personas las llaman “las apuntadoras”, se trata de Alfa y Beta del Centauro (Figura 1).

Una vez que hemos ubicado la Cruz del Sur, será más fácil identificar la constelación del Centauro. (Figura 2) A partir de las estrellas Alfa y Beta Centauro, podemos ir “formando” este ser mitológico que representa a Quirón, con cuerpo de caballo y torso de hombre, fruto de la unión de la ninfa Fílira y su tío Crono (convertido en caballo para conquistarla).

Quienes deseen más información pueden ingresar a:

http://www.astronomia.org.bo

gsf.